El suministro de agua potable se hace cada día más crítico en el Litoral Central. Los ciclos de abastecimiento se han alargado hasta a 75 días (dos meses y medio) en sectores de las parroquias Maiquetía y Carlos Soublette.
Centros educativos y hasta hospitales, que son atendidos por cisternas, han registrado problemas por la falta de agua potable. Las autoridades reconocen la situación y aseguran que están trabajando para ofrecer respuesta. La fuerte sequía que vive el Litoral , ha provocado la baja de los diques de Puerto Cruz, Chichiriviche y Puerto Maya encargados de abastecer a la zona oeste de la región.
A esto se suma la merma de casi el 80% de captación en los caudales de Naiguatá, San Julián, Macuto y Camurí Grande. “Estamos en una situación delicada por lo que es necesario que la población tome conciencia de lo que está sucediendo y sea ahorrativa con el agua” advierte el gobernador Jorge Luis García Carneiro.
No obstante aseguró que para palear la situación, están enviando cisternas a las comunidades con la falla de agua.